Durante enero último se celebró en Villa Giardino –Córdoba– el habitual Retiro de Misioneros Transculturales que desde hace 18 años viene realizando la Red Misiones Mundiales, con el propósito de bendecir y proveer cuidado integral a los misioneros argentinos y sus familias, que han servido o están sirviendo transculturalmente.
En esta oportunidad asistieron alrededor de 100 personas, provenientes de varias provincias del país y distintas denominaciones evangélicas, de las cuales 60 eran adultos y 40 niños y adolescentes, quienes disfrutaron de hermosos días de compañerismo, descanso, ministración y renovación. Participaron de este grupo, además de misioneros con años de servicio, algunos candidatos y sus familias que están concretando su proceso de salida al campo misionero durante este año 2020.
Otra de las características del retiro fue el gran número de hijos de misioneros, un indicador de la etapa en la que se encuentran las familias misioneras argentinas. Incluso participaron algunos hijos que están de regreso en Argentina, viviendo solos, para estudiar en la universidad, mientras sus padres permanecen en el campo misionero. En este sentido es importante destacar la tarea que está realizando el equipo de CTC (Chicos de Tercera Cultura), que acompaña a los hijos de misioneros durante todo el año.
En esta oportunidad tuvimos el privilegio de contar con la ministración de la pastora Claudia Bustamante, quien desde hace años realiza una tarea de cuidado pastoral de misioneros, a quien Dios usó para traer un bendecido tiempo de reflexión, descanso y sobre todo renuevo en la intimidad con Dios.
Durante el retiro varios obreros compartieron devocionales y testimonios que fueron de ánimo para muchos. Uno de los días, Marilina Bongarrá (misionera y traductora de la Biblia en Malasia) compartió: “Mi presencia irá contigo y te daré descanso”. Otro de los días, compartieron los veteranos misioneros Abel y Patricia Vallejos, quienes sirvieron en África por muchos años y fue la primera vez que pudieron participar del retiro.
Fue muy enriquecedor el encuentro entre obreros que se conocían de oídas pero ahora se veían personalmente, así como muchos otros que se conocieron durante el retiro y disfrutaron compartir las vivencias de los largos años de servicio, confiando que el otro entiende de qué se está hablando ya que han atravesado circunstancias similares, todo en medio da mateadas y tiempos de profunda amistad.
Como todos los años, el retiro fue totalmente gratuito para los obreros y sus familias, gracias a la valiosa colaboración de iglesias, agencias misioneras, familias y amigos de la Red Misiones Mundiales de todo el país, quienes ofrendaron recursos para becar a los participantes. Es por eso que agradecemos profundamente a quienes han orado, ofrendado y apoyado estos retiros, que sostienen la obra de Dios a través de hermanos argentinos en las naciones.
Por último, aprovechamos la oportunidad para animar al pueblo evangélico a recordar en oración a los más de 700 misioneros argentinos que se estima están sirviendo actualmente en otras culturas y países. Y redoblar las ofrendas que los sostienen, en especial por las graves dificultades que están atravesando para recibir el sustento económico debido a las restricciones oficiales para enviar dinero al exterior y el alto valor del dólar con el impuesto del 30%, lo cual encarece aún más sus presupuestos familiares.
Para mayor información: https://redmisionesmundiales.org