Buenos Aires, 20 de octubre de 2024.- En las instalaciones del Seminario Sudamericano (Semisud), de la ciudad de Quito, Ecuador, se realizó la 11° Asamblea General de la Alianza Evangélica Latina (AEL) entre los días 14 al 18 del corriente mes, que nucleó a presidentes y representantes de Alianzas de 20 naciones.
Allí, pastores y líderes desarrollaron momentos de análisis, reflexión y planificación para la entidad que los agrupa. Representando a la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina asistieron el actual presidente, el pastor Christian Hooft, el vicepresidente de Relaciones Externas, pastor Rafael Pedace – quien participó en las meditaciones junto a otros pares-, Jonatan Proietti, miembro del Consejo Directivo Nacional de la Alianza y actual Director Ejecutivo de AEL, la Dra. Silvia Arn de Mateo, y Marta Hotton, estas dos últimas con funciones diversas de acuerdo a sus actividades ministeriales.
Dentro de los temas abordados durante las diferentes sesiones, sobresalieron: la presentación de informes de las 16 comisiones de la Alianza, donde se puso en valor la concreción de un avance del 60% en la ejecución respecto al Plan Estratégico; se brindó la bienvenida a nuevas entidades asociadas como la Asociación Alberto Mottesi, y el Ministerio Hombre de Paz; se acordó la realización de la próxima Asamblea General en Colombia del 8 al 12 de septiembre de 2025 y en Costa Rica, del 12 al 16 de octubre de 2026; y se decidió la asistencia por parte de los titulares de las Alianzas a la Asamblea de Presidentes en Corea del Sur organizado por la WEA (Alianza Evangélica Mundial).
Asimismo se procedió durante la penúltima jornada de la Asamblea a la elección de cargos de la Junta Directiva de la entidad, que quedó constituida por un período de dos años por el pastor Juan Cruz Cellammare (Presidente), el pastor Jorge Gómez Varela (Vicepresidente Primero), el pastor Louder Garabedian (Vicepresidente Segundo), el pastor Mariano Blázquez (Secretario), el pastor Nérsido Borg (Tesorero), el pastor Daniel Romero (Vocal 1), el pastor Eduardo Concha (Vocal 2), el pastor Olgálvaro Bastos (Vocal 3), el pastor Eduardo Gómez (Vocal 4), el Obispo Emiliano Soto (Vocal 5), el pastor Christian Hooft, titular de ACIERA, fue reelegido en su cargo como (Vocal 6), y el pastor Priciano Gil como Vocal 7.
Por otra parte se desarrolló un Culto Unido con las denominaciones del país anfitrión, donde se homenajeó a los pastores Estuardo López (Presidente de la Confraternidad Evangélica Ecuatoriana) y el Pastor Edgar Castaño de Colombia. Ambos cesan con sus funciones dentro de la AEL en donde han realizado una labor en favor de iglesia por muchos años. Con el fin de promover la unidad, pertenencia y servicio se concretaron paneles de expertos con temas como “Historia de la AEL, un panorama de la primera década”, “Impacto de la AEL en el desarrollo y fortalecimiento de ministerios consolidados”, “Sistema de Valores en la gestión de la AEL. Principio de Unidad – Sentido de Pertenencia – Cultura de Servicio” y “AEL en la próxima década. Desafíos: Cambio de paradigmas, barreras a romper. Identidad de la AEL en la siguiente década”; el informe financiero correspondiente al período 2023-2024 fue recibido y se aprobó el presupuesto para el año 2025.
Otra determinación trascendente de los miembros de AEL fue la aprobación del documento denominado “Declaración de Quito”, el cual refleja principios y compromisos de AEL en la actualidad. Entre los párrafos salientes de la Declaración se destaca: “A pesar de las diversas realidades que enfrentamos en nuestros países, y de nuestras singularidades culturales, históricas y denominacionales, coincidimos en los valores esenciales y en la verdad del Evangelio de Jesucristo, la salvación por gracia, y la inspiración de las Sagradas Escrituras, declaraciones de fe que compartimos junto a la mayoría de las iglesias evangélicas y protestantes del mundo.”
“Afirmamos nuestro llamado a construir vínculos de unidad que alienten la cooperación y la colaboración entre las iglesias y los creyentes de nuestros países, considerando con un especial énfasis solidario a aquellos que están atravesando situaciones difíciles o complicadas. Nuestro propósito es sinergizar esfuerzos para alcanzar resultados más efectivos en la misión que se nos ha encomendado. Nos proponemos fortalecer la firmeza y salud espiritual de nuestras congregaciones y ministerios. Asimismo, profundizar la obra evangelizadora, de discipulado y de servicio en todos los ámbitos sociales y culturales, como también la promoción y defensa de los principios cristianos y las libertades individuales, fundamentales para la vida, el ser humano y la familia”, expresa el documento.
Y en el cierre la AEL reafirmó“…reafirmamos nuestro llamado bíblico a la unidad, con sentido de pertenencia, y una cultura de servicio. Declaramos que, al seguir estos principios de manera plena, estaremos construyendo el modelo de iglesia que Jesús nos enseñó y legando una herencia valiosa a las futuras generaciones.”