Buenos Aires, 11 de diciembre de 2023.- Este domingo 10 del corriente, como parte de los actos del día de la asunción de un nuevo gobierno democrático, minutos después de las 19:30 horas, se desarrolló en la Catedral Metropolitana en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires la ceremonia oficial de invocación interreligiosa. Representantes de diferentes cultos pronunciaron oraciones en favor de las nuevas autoridades gubernamentales encabezadas por el flamante Sr. presidente de la Nación, Dr. Javier Milei, la Sra. vicepresidente de la Nación Dra. Victoria Villarruel y ministros del gabinete nacional. También estuvo presente el Jefe de Gobierno de CABA, Dr. Jorge Macri y su gabinete, representantes diplomáticos, líderes de las fuerzas armadas e invitados especiales.
Durante el acto, que fue encabezado por el Arzobispo de Buenos Aires y cardenal primado Mons. Jorge Ignacio García Cuerva, y de la que participaron representantes de distintos credos, en representación de las iglesias evangélicas fue invitado a elevar una oración, el titular de la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA), pastor Christian Hooft, quien primeramente le expresó al Presidente el compromiso de las iglesias evangélicas de orar, conforme al mandato bíblico, por él y todo su gabinete de ministros, para el bienestar de todos los argentinos.
La oración comenzó con un pedido de perdón a Dios por haberle dado la espalda en muchas ocasiones y no considerarlo como el Primero, el Soberano, el Todopoderoso. También por piedad y misericordia por no ser buenos administradores. En ese sentido, la oración expresó la no aceptación de la maldición de la pobreza y el ruego para volver a ser el país próspero y bendecido que fuera de antaño. También usó la figura literaria del Ave Fénix para representar la imagen de volver de las cenizas, como un resurgir, una resurrección por parte de Dios.
Luego siguió Hooft: «Rogamos por este nuevo gobierno en cabeza del Sr. presidente de la Nación, Dr. Javier Milei, la Sra. vicepresidente Dra. Victoria Villarruel y por todo su equipo de ministros. Que les des la sabiduría, la templanza y la prudencia necesarias para llevar adelante los cambios, para implementar las políticas indispensables para el bienestar de todo nuestro pueblo. Que los llenes de tu Espíritu, que envíes tus ángeles que los protejan y libren de todo mal, y que les des fuerzas de arriba a ellos, pero también a todos los ciudadanos, porque hoy tenemos que estar unidos de verdad, todos juntos, nadie afuera.”
Después continuó orando por bendición para el campo, la industria y los servicios. “También para que Argentina pueda salir de las deudas y crecer con inversión. Que podamos detener la inflación y tener salarios dignos. Por una generación de jóvenes emprendedores e innovadores. Para que se fortalezca la cultura del trabajo con igualdad de oportunidades.”
En la última etapa, la oración que duró 3 minutos, se refirió a la paz y al diálogo indispensable para salir adelante y decirle a la violencia “nunca más”. También para tener un corazón sensible a los necesitados, los más débiles, los ancianos, los niños y las personas por nacer. “Que nunca perdamos la dimensión humana, que no falte la fe, la solidaridad y la verdad” rezó el pastor.
El final de la oración fue puesto en la esperanza de volver a creer, poniendo a Dios en primer lugar, como Fuente de toda razón y justicia, como dice la Constitución Nacional. La conclusión fue sintetizada en una palabra de fe para el país: En el nombre de Jesucristo, que Argentina se levante. “Dios te dice: Argentina no temas, levántate”.
Además del presidente de ACIERA, y del Arzobispo titular de la Catedral, tuvieron participación en la ceremonia otros 4 representantes de los credos: por la iglesia ortodoxa el Arzobispo Iosif Bosch; por la iglesia anglicana el Obispo Brian Williams; por la comunidad judía el rabino Shimon Axel Wahnish y por la comunidad musulmana el Sheij Salim Delgado Dassum.
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