Busquemos la guía de Dios y no la de los hombres antes de votar

En vista de arengas políticas hechas a través de los medios masivos de comunicación dirigidos a la iglesia cristiana, y habiendo recibido en ACIERA numerosas quejas telefónicas como también en las redes sociales, el Consejo Directivo Nacional que recientemente difundió un documento sobre el cristiano y la política, reitera que este acto cívico debe convocar a los creyentes en todo lugar, a levantar nuestras manos al cielo para clamar a Dios con la finalidad de que cada voto sea sufragado en un contexto de paz social, conciencia electoral y respeto por las libertades del electorado a la hora de emitir su voto.

El Apóstol San Pablo escribió en 1ra Timoteo 2:8 “Orando en todo tiempo y en todo lugar, levantando manos santas, sin iras, ni contiendas“. Creemos que este es un tiempo especial porque una vez más estamos, como Nación, frente al acto cívico más importante en la vida del País. Una nueva oportunidad de seguir siendo la república que se formó hace 200 años, eligiendo  autoridades nacionales, provinciales y municipales.

Hay algo que es sumamente importante: el voto es privado para cada ciudadano. Cada cual frente a Dios hará su elección de acuerdo a sus convicciones. Rogamos que nadie use el nombre de Dios, ni de Su Iglesia, ni de instituciones cristianas para arengar hacia ningún partido político o candidato en especial. Nadie tiene autoridad moral y espiritual para señalar quién es el representante y mejor candidato para las iglesias evangélicas.

Como una Federación que reúne iglesias evangélicas jamás nos permitiríamos la atribución de decirle a cualquier persona por quién votar. Simplemente llamamos a la reflexión sobre los proyectos que se acerquen más a la visión de cada persona. Orando en todo tiempo y lugar, sin contiendas, para que la voluntad de Dios se plasme en la Argentina.

Pero además porque creemos que toda autoridad como marca las Sagradas Escrituras son puestas por Dios, para que vivamos de manera quieta y sosegada. Es nuestro rol como Iglesia de Jesús, invocar la protección y guía de Dios, como fuente de toda razón y justicia. Creyendo que si nos ponemos de acuerdo para orar a lo largo y a lo ancho de nuestra Nación, todo lo que pidiésemos a nuestro Padre Celestial él lo hará. Oramos por quienes hoy están en eminencia como nuestros gobernantes. Oramos también por aquellos que gobernarán a partir del 10 de Diciembre de 2015. Oramos por nosotros los ciudadanos de este país.

Domingo, que es el día del Señor, sea también una fiesta cívica por nuestra amada patria en paz, en unidad y mirando al cielo por la guía de Dios para nuestra Nación.

CONSEJO DIRECTIVO NACIONAL
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