Buenos Aires, 7 de marzo de 2022 — A raíz de la catástrofe por los incendios en la provincia de Corrientes, los días 24 y 25 de febrero la pastora Ligia Wurfel, directora de Cooperación de ACIERA viajó a Santo Tomé y Virasoro, dos de las ciudades más afectadas de la provincia de Noreste Argentino, con el fin de evaluar la situación y diseñar una estrategia de colaboración y ayuda con la pastoral del lugar.
Wurfel fue acompañada por el pastor Sergio Diaz, oriundo de Corrientes capital e integrante del Consejo Directivo Nacional (CDN) de ACIERA. Juntos dialogaron con los pastores locales quienes dieron cuenta del alcance de los incendios, las necesidades puntuales del momento, y una proyección a corto plazo de qué situaciones surgirán después de que se apaguen los incendios.
Los pastores presentes dieron cuenta que las iglesias locales están haciendo un esfuerzo para la ayuda social en la emergencia. Así es que el pastor Gregorio Velazquez, de la Iglesia Asamblea de Dios Pentecostal, contó que alojaron a los bomberos (alrededor de 150), que llegaron a Santo Tomé -uno de los centros de operaciones- donde se les brindó no sólo alojamiento sino también alimentación. Estas mismas congregaciones cocinaron para las familias que perdieron sus viviendas, y los hermanos voluntarios acercaron los alimentos cada día. Aproximadamente 500 personas llegaron desde la provincia de Buenos Aires, en su mayoría bomberos. También se registraron alrededor de 250 personas de otras provincias que llegaron como voluntarios. Gran parte de este contingente fue atendido por las iglesias. Asimismo, las diferentes congregaciones hicieron acopio de alimentos, ropa, agua mineral y demás elementos de primera necesidad para asistir a los damnificados. Otra de las necesidades que se plantean con las donaciones es el traslado a la zona afectada. Por esta razón se necesitan recursos para poder asistir en ese sentido.
Uno de los mayores problemas, es la sequía. No se puede plantar y el pequeño productor está en serios problemas. Se quemó lo que tenía y no puede sembrar por falta de agua. De igual manera afecta a los horneros que no pueden trabajar sus hornos de ladrillos por la falta de agua. Es triste ver la situación de los animales que no han muerto, porque padecen mucha hambre y sed, y las napas de agua se secaron debido al intensa temperatura.
“Aserraderos, hornos de ladrillos, campos ganaderos, ya comunicaron que se quedan sin trabajo las familias, la pobreza que se viene es grande. Este es el informe social en general. Para establecer pautas de ayuda, estuvimos de acuerdo en realizar tres tareas principales: un relevamiento de las necesidades especificas, la organización de voluntarios y la distribución de donaciones físicas”, señaló la pastora Wurfel.
Para asistir a las necesidades planteadas es necesario mantener una organización local que esté en contacto con ACIERA, por lo que se conformó un comité de crisis evangélico entre las iglesias representadas, integrado por el Pr Sergio Fleitas de Virasoro, el Pr Gregorio Velazquez de Santo Tomé, y el pastor José Mescher de Santo Tomé.
A manera de conclusión la pastora Wurfel aseguró: “fue una reunión muy productiva, especialmente para fortalecer la unidad de la iglesia en la región. Pude evaluar que hace falta mucho trabajo conjunto y ahí vamos a estar. Si bien hay consenso era necesario conformar una comisión ad hoc que sea el nexo con ACIERA para coordinar y colaborar con las tareas que vienen ahora después de apagados los incendios. Los pasos a seguir son claros. La respuesta a la restauración de todas las pérdidas la dará el Señor, y nosotros ayudaremos en todo lo que podamos. La función más importante es llegar con la Palabra de esperanza y el Evangelio a las personas afectadas que no conocen de Dios”.
