Buenos Aires, 29 de agosto de 2025.- En tiempos electorales, cuando las pasiones políticas pueden despertar discusiones, agravios y hasta violencia que divide a la sociedad, elegimos unirnos en oración.
Creemos que la llave de la paz siempre está en el pueblo de Dios de rodillas.
Como iglesia, elevamos nuestra voz a Dios recordando que la violencia política ha dejado profundas heridas en nuestra historia.
Oramos por la salud de nuestra democracia, por la paz de nuestra nación y para que la justicia de Dios sea fundamento en la Argentina.
«Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.» Mateo 5:9
